Influyentes Cantabria

Gabriel César Jiménez. Realidad virtual para prevenir riesgos laborales

La realidad virtual se está convirtiendo en una eficaz herramienta en la prevención de riesgos laborales. Con ella se recrean con la máxima sensación de realidad, situaciones de emergencias, que facilitan a los trabajadores y técnicos de prevención, aplicar comportamientos y procedimientos de seguridad adecuados para evitar riesgos y accidentes laborales en el mundo real. Gabriel César Jiménez, CEO de GA Group, una de las empresas que participarán los días 10 y 11 de noviembre en la Feria de la Innovación en Prevención de Cantabria es quien se acerca hoy a Influyentes para hablarnos sobre por qué las empresas deberían utilizarla.

Nosotros desarrollamos proyectos vanguardistas utilizando la Realidad Virtual y las experiencias en 360º para lograr sensibilizar y concienciar al usuario final.  Para ello, exploramos todas las posibilidades que ofrece la tecnología y, junto con nuestro equipo de expertos en: coordinación de proyectos, Prevención de Riesgos Laborales, Recursos Humanos, andragogía, gamificación, psicología, coaching, storytelling, diseño gráfico, desarrollo y programación web y videojuegos… conseguimos desarrollar los formatos atractivos imprescindibles que logran atraer al usuario e impactar con mensajes que perduren en su memoria. 

Nuestro objetivo era muy claro: Sensibilizar sobre la importancia de los conocimientos, acciones y tareas preventivas.  

“Lo que no se informa, no existe” es una máxima del periodismo que deberíamos aplicar a todas las áreas destinadas a formar e informar a personas, pero no es suficiente con lograr esta transmisión de información, resulta necesario generar un impacto emocional si queremos conseguir un cambio de hábitos consciente y permanente en el usuario. 

Esta formación inmersiva convierte al usuario en un agente activo de su formación y por ello, permite captar su atención por más tiempo a la vez que aumenta su motivación. ​Además de este indudable valor como medio para crear vivencias duraderas, la formación inmersiva es la herramienta perfecta para colocar al usuario en situaciones muy similares a las reales: se verá inmerso en un escenario de riesgo, que percibirá como real, pero totalmente ausente de peligro.​ Esto lo convierte en un medio idóneo para realizar entrenamientos sobre situaciones que puedan conllevar algún tipo de riesgo, antes de situar a la persona en el escenario real.​ 

 Las posibilidades de estos formatos son prácticamente ilimitadas:  desde entornos gamificados, serious games y situaciones simuladas en las que los usuarios demuestran de forma práctica e interactiva los conocimientos y habilidades que la organización considere oportuno con el objetivo de detectar deficiencias y áreas de mejora.​ Concretamente, hemos recreado múltiples procedimientos integrales de trabajo desde el punto de vista productivo, medioambiental y preventivo; la creación de  escenarios virtuales (reales o simulados) que servirán de sala de formación experiencial sobre la temática deseada.​ Los mandos del equipo de realidad virtual actúan como prolongación de sus manos, lo cual, unido a la visión periférica que ofrecen las gafas, logra una experiencia inmersiva de gran valor didáctico o el  diseño y personalización de salas de escape virtuales adaptadas a las necesidades, características y demandas del cliente.

Los escenarios 360º constituyen un sistema de aprendizaje interactivo: permiten que el usuario se relacione con los elementos de su entorno creado a propósito para esta actividad.​ En la creación del mencionado entorno se insertan diversas actividades como: puntos calientes, contenidos, audiovisuales, o ejercicios que deberá visualizar o llevar a cabo el destinatario. Para llevarlo al siguiente nivel, hemos  implementado en las experiencias virtuales y 360º la opción de videollamada en tiempo real, lo que permite guiar y acompañar al alumno durante toda o parte de la experiencia, sin necesidad de usar herramientas adicionales. 

Con todo esto, podemos impartir formaciones colectivas y realizar dinámicas colaborativas resulta posible, ágil y sencillo. El tutor puede interactuar mediante videollamada con el usuario en tiempo real y permite al anfitrión/tutor controlar el uso de los micrófonos y moderar la acción (ceder o retirar el control) en todo momento, consiguiendo un mayor grado de adaptación de la formación a las necesidades del alumno, un aumento en la interactividad y un trato personal mucho más cercano, lo que conlleva, a su vez, un aumento en la implicación del alumnado. ​​ 

 

 

 

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