El 10,3 % de las mujeres estudiantes y el 16,9 % de los estudiantes tienen intención de fundar una empresa al terminar sus estudios. A los cinco años de haberlos finalizado, la brecha es aún más profunda: la intención de emprender crece hasta el 19,9 % en ellas y hasta el 28,6% en los hombres. Los datos corresponden al último informe GUESSS ‘Mujer universitaria, elecciones de carrera, espíritu emprendedor y felicidad’ en el que participan 3.000 universidades en 58 países y del que han formado parte 98.000 estudiantes españoles.
Las mujeres emprenden menos, el clima emprendedor de la universidad importa, no hay más emprendedores entre los hijos cuyos padres han creado un negocio y ellas optan por iniciar negocios solas o con otras mujeres. Este es el resumen del informe GUESSS sobre emprendimiento femenino y universidad.
A ellos y a ellas, la formación y el clima emprendedor de las universidades les afecta a la hora de decidirse a emprender. Y aunque parezca que el sistema universitario español potencia esta vía, sólo el 34,1 % de las mujeres y el 40,3 % de los hombres han asistido a algún curso de emprendimiento y la mayor parte de los participantes han valorado la calidad de la formación recibida en esta materia como deficiente.
Las mujeres ofrecen una valoración ligeramente superior del clima emprendedor en su universidad, un 3,2 sobre una escala de 1 a 7. Sin embargo, en lo que se refiere al clima inclusivo, tanto mujeres como hombres, lo consideran positivo con una puntuación del 5,1 y 5,0, respectivamente.
El 15,4 % de las estudiantes en España son emprendedoras nacientes o lo que es lo mismo, están involucradas en una iniciativa emprendedora mientras cursan sus estudios. El 5,0 % de las estudiantes y el 8,6 % de los estudiantes dirigen su propia empresa que se encuentra operativa en el mercado pero sólo el 27,1% de ellas y 31,9% de ellos desea que su propio negocio se convierta en su principal ocupación tras graduarse.
Las estudiantes próximas a finalizar su carrera aseguran optar por el empleo por cuenta ajena, público a privado, incluida la carrera académica (34,9%). Ellos por el empleo en una empresa privada (42,0%).
A la hora de emprender, el 24,9% de mujeres lo hacen en solitario frente al 19,7% de varones que se comportan así. Asimismo, el 96,3% de las mujeres que no han emprendido en solitario optan por asociarse con otras mujeres, porcentaje que, en el caso de los hombres, baja hasta el 40,1%.
Los estudiantes que han participado en el estudio han respondido a si tenían familiares cercanos que hubiesen emprendido previamente. La conclusión aquí es que este hecho no influye significativamente en la toma de decisiones sobre emprendimiento. No hay más emprendedores entre los hijos cuyos padres han creado un negocio.
El informe GUESSS recomienda a instituciones y autoridades académicas ofrecer mayor calidad en la formación emprendedora. También recomienda a las estudiantes valorar la importancia del espíritu emprendedor en su desarrollo profesional. Por su parte, según este informe, la comunidad universitaria debe estimular a los estudiantes y guiarles en la aplicación del conocimiento a la realidad de su entorno.