Si hay una tendencia sobre la que las empresas tendrían que estar poniendo el foco para adaptar su manera de vender es la de la economía del uso frente a la economía de la compra. No solo los Millennials o la Generación Z han optado por alquilar música, alquilar coches, alquilar software… Este comportamiento se extiende cada día más haciendo que un amplio porcentaje de población sea usuaria de todo pero dueña de nada. ¿Y qué hay detrás? Por un lado, una tendencia responsable hacia sistemas más sostenibles que el modelo tradicional de consumo, que conlleva, entre otros, beneficios medioambientales (por ejemplo, si se comparte vehículo se emitirán menos contaminantes a la atmósfera que si cada persona utiliza su vehículo privado). Por otro lado, en épocas de crisis, de inestabilidad laboral, la tasa de temporalidad entre los jóvenes es de 67,5%, hace que se vire a modelos de economía colaborativa que permiten el desempeño de las mismas actividades reduciéndose la barrera de acceso económica.
Sumando ambos factores, las empresas deberían estar escuchando a estas dos generaciones: Millennials y Centennials, reacias al viejo paradigma de comprar, usar y tirar. Hay un cambio que ya no tiene vuelta atrás. Las nuevas generaciones no quieren sumar propiedades sino usar el mayor número posible de cosas. La adquisición pierde fuerza en favor de alquilar todo tipo de servicios y acceder a un mayor número de servicios.
Los jóvenes, además de tener una nueva mentalidad en la que prima lo sostenible, compran, sobre todo, online. Su preocupación por el daño ecológico habla de una sociedad nueva que demanda otra manera de usar y ellos serán los nuevos compradores en menos de cinco años.
Empresas como Netflix, Filmin, Spotify, Amazon Prime, BlaBlaCar, Airbnb, Uber, coworkings, lavanderías por uso, alquiler de coches, herramientas, energía, seguros…han cambiado la manera de consumir, ahora se alquila y se puede alquilar todo. La economía colaborativa ha venido a cubrir un vacío creado por la existencia de necesidades insatisfechas de los individuos que generan nichos de mercado nuevos.
El ejemplo de Guppy
Guppy, el primer servicio de carsharing, alquiler de coche eléctrico por kilómetros que opera en Cantabria desde hace apenas un mes, incrementa cada día el número de usuarios y alquileres en Santander. La acogida por parte de los usuarios y, en su mayoría, repiten en el uso de forma continua y casi diaria. “Es una clara señal de que nuestra ciudad estaba esperando un servicio como el que ofrece Guppy: cómodo, económico y sostenible. Además, confiamos en que una vez dispongamos de las plazas de aparcamiento en exclusiva en puntos estratégicos de la ciudad, y por tanto podamos atender a mayor población veremos aumentar de forma relevante nuestro números de servicios”, señala Juan Gracia, director de Guppy Cantabria.
Para Gracia, las organizaciones deberán adaptarse a la manera de comprar de los que van a ser los máximos consumidores de las próximas décadas con inmediatez y fácil acceso. Lo que ven y pueden utilizar en ese instante, sin compromisos, gana frente a la adquisición del producto, incluso aunque este sea mejor. “El cambio de mentalidad es evidente, cada día pensamos más en el pago por uso de servicios y menos en su propiedad. Si algo se rompe queremos tener su reemplazo al instante, ya no sirve enviar el producto a reparar y que te lo devuelvan en unas semanas e incluso días”.
Pero hoy, hay todavía muchas PYMES reacias a ver un cambio que ya no tiene vuelta atrás. ¿Cómo lograr que las pymes vean esta revolución y lo adapten a sus empresas para permanecer en el mercado y no ser devorados por la 4ª revolución de la digitalización? Debemos apostar por la flexibilidad y eliminar costes fijos. Subcontratar aquellas tareas que otros puedan hacer mejor, y centrarnos en lo que somos verdaderamente especialistas y donde generamos valor. Dejemos que cada empresa se especialice en hacer algo realmente bien y que los demás utilicemos ese servicio. Las economías de escala van en aumento y hay que perder el miedo a utilizar los recursos de quien nos rodea. Quien mejor sepa aprovechar la información en tiempo real de la que disponemos será quien mejor pueda atender las necesidades del mercado.
Guppy, por ejemplo ofrece una solución de movilidad óptima para empresas que buscan esa flexibilidad. La empresa ya no tiene que comprar vehículos ni preocuparse por el seguro, mantenimiento y demás costes asociados. Solo pagará por el uso, los servicios realizados. Si a esto le sumamos la inmediatez del servicio, sin tiempos de espera o gestión de contratos, y que se trata de movilidad con cero emisiones, guppy es definitivamente una opción muy inteligente.
¿Y qué hay detrás de este cambio?
Una inminente transformación digital basada en tecnologías, captar datos, modificar procesos e introducir IA en estos procesos. Para ello, no se puede hablar tan solo de digitalización, si no de un cambio profundo de la manera de producir y de acercarse al cliente final. Para 2024 se espera que el mercado global de inteligencia artificial (AI por sus siglas en inglés) genere más de 300 mil millones de dólares, según IDC y que esta tecnología crezca en diferentes verticales como retail, viajes, y sector salud, entre otros.
Además, la economía colaborativa se ha convertido en una fuerza transformadora disruptiva a nivel mundial cimentada, de acuerdo con PwC sobre cuatro pilares: plataformas tecnológicas que conectan oferta y demanda, democratización al fomentar nuevas maneras de emprender, transacciones que reduce los costos de poseer y una mayor interacción social y representa ya en España el 1,4% del PIB.
Otros casos de éxito:
SOLABRIA: comercializadora cántabra. Comercializa electricidad verde a partir del sistema de utilización de los certificados de garantía de origen. En la cooperativa somos 100% renovables, así que los certificados verdes garantizan que el 100% de la energía que consumen nuestras cooperativistas ha sido generada por alguna instalación productora de energía renovable.
La Renovera, en Cantabria, iniciativa que pretende vincular la producción de alimentos con la biodiversidad y el sostenimiento de modos de vida y expresiones culturales singulares del territorio, a la vez que se combate el cambio climático. La plataforma reparte verduras, quesos y otros alimentos elaborados de más de 40 productores locales a todas las comarcas de Cantabria.
Miríadax: es la primera plataforma de MOOC’s iberoamericana que apuesta por impulsar el conocimiento de calidad en español y portugués. Esta iniciativa está impulsada por Telefónica Educación Digital –compañía especializada en ofrecer soluciones integrales de aprendizaje online para la Educación y Formación- desde enero de 2013, con el fin de fomentar la difusión del conocimiento en abierto en el espacio iberoamericano de Educación Superior.
Etsy, es una comunidad global donde la gente se conecta para comprar y vender productos elaborados por artesanos, artistas y diseñadores.
Milherramientas: Mil herramientas nace con el objetivo de ofrecer la posibilidad de alquilar herramientas a nivel nacional en modalidad online. Una manera ágil y cómoda, que permite a los usuarios disponer de ellas en el menor tiempo posible y posibilitando a las empresas ser flexibles a la hora de asumir nuevos retos. La idea es muy simple, consiste en aplicar un nuevo canal de distribución a una idea básica como es el alquiler de herramientas, y a partir de ahí, han desarrollado un sinfín de utilidades y formatos que faciliten la realización de múltiples tareas.
Ecodicta mediante una suscripción mensual puedes alquilar prendas para renovar tu armario de forma sostenible. Seleccionan cada prenda bajo altos estándares de calidad y apuestan por nuevos talentos en el mundo del diseño. Buscan alargar el ciclo vital de cada prenda, reducir el consumo y por tanto la producción.
Me lo prestas? Tienda de alquiler de vestidos de fiesta, tocados y complementos de las primeras marcas a un precio low cost. Además de alquilar tu look de invitada puedes rentabilizar esas prendas de fiesta que tienes en tu armario ocupando espacio incorporando esa prenda al catálogo de la web. Cada vez que la prenda se alquile ingresan el 35%.
